¿Qué novedades se publicaron durante el 2015 sobre drogas de abuso?;
He realizado una revisión y he seleccionado los 6 artículos que me
han resultado más interesantes, aunque por supuesto ha habido otros que por problemas
de espacio y para evitar que la revisión se haga muy pesada no he incluido.
En primer lugar se publicaron dos informes de referencia:
El informe mundial sobre las drogas (1), de la ONU, que presenta
un panorama completo anual de las últimas novedades habidas en los mercados de
drogas ilícitas del mundo. El informe se centra en la producción, el tráfico y
el consumo de los principales tipos de drogas ilícitas, así como en las
consecuencias para la salud de ese consumo
y la encuesta edades (2) sobre consumo de drogas en población española, realizada
por el plan nacional sobre drogas; algunas conclusiones del estudio:
Principales drogas consumidas: alcohol, tabaco e hipno sedantes; que además son
las únicas que aumentan su consumo comparándolo con el consumo del 2011.Todas las
drogas son más consumidas por hombres, salvo los hipno sedantes, donde hay el
doble de mujeres consumidoras que de hombres. Las drogas con edad de inicio más
temprano son tabaco (16,4 años), bebidas alcoholicas (16,7 años) y cannabis (18,6 años); y las de inicio más
tardío hipno desantes (35,1 años), tanto con receta como sin ella (31,3 años).
Los consumos de alcohol y tabaco de los últimos años se encuentran estables; y
es la primera vez que se utiliza el AUDIT para la encuesta poblacional: 4,9% de
los encuestados tiene un consumo problemático de alcohol, y de ellos un 4,5%
presentan consumo de riesgo y un 0,4% una posible dependencia.
Todas las demás sustancias tienen
un consumo descendente en los últimos años.
Aunque el consumo de las llamadas drogas emergentes (spice,
metanfetamina, nexus…) siendo aún muy bajo, va en aumento, y sobre todo se ve un aumento de la
adulteración de las sustancias clásicas con ellas.
Según la encuesta el número de
personas que iniciaron consumo de cannabis el último año es superior a los que
iniciaron consumo de tabaco.
En general hay un descenso de la
percepción del riesgo de la mayoría de las drogas.
Respecto a las vías de información
sobre las drogas, la población tiene mucho interés en recibirla, sobre todo de
los profesionales sanitarios, pero de este colectivo obtienen información en un
porcentaje muy pequeño.
Respecto a la intervención en
consumo de drogas, destaco un artículo, que aunque realizado fuera de nuestro
medio (En Tailandia), con todas las precauciones a su interpretación que esto
comporta, se ha realizado en atención primaria y compara si tras la
administración del test ASSIST (3) (OMS)
es igual de válido realizar la intervención breve ligado al ASSIST o un simple
consejo. La muestra es de 236 personas y concluye que en la atención
primaria la administración del test ASSIST y diciendo a los pacientes su
puntuación, seguida bien de la intervención breve formal o un simple consejo,
son igualmente eficaces en la disminución de consumo de sustancias durante un
máximo de seis meses.
Otro artículo que destaco se refiere
a un problema que en estados Unidos es una realidad preocupante desde hace años
y en Europa empieza a hablarse: el elevado uso
de analgésicos opioides y el aumento de la mortalidad (4); En este artículo
publicado en el New England Journal of Medicine a principios de año se describen las tendencias en el uso y abuso de analgésicos opioides de
prescripción a partir de datos hasta el 2013, observando un aumento del consumo
y la mortalidad debida a su uso. Concluyen que desde la administración se debe
realizar un esfuerzo para controlar el uso de analgésicos opioides.
En noviembre del 2015 se publicó un interesante
artículo sobre un tema del que hay escasos datos: la toxicidad aguda de drogas recreativas y nuevas sustancias psicoactivas
(5); el objetivo del estudio fué recoger los datos de intoxicación aguda de personas que
habían consumido estas sustancias y acudían a 16 centros centinela de 10 países
Europeos durante 12 meses. Los resultados fueron que las sustancias más
comúnmente involucradas eran las drogas recreativas clásicas (64,6%), seguidas
de los medicamentos con receta (26,5%) y las nuevas sustancias de síntesis
(5,6%). Respecto al tipo de sustancia; de mayor a menor frecuencia fueron
heroína, cocaína, cannabis, GHB y anfetamina.
Y para acabar esta breve revisión destaco una
editorial publicado en noviembre del 2015 en el BMJ sobre el “chemsex” (6). Se define como sexo
intencional bajo el uso de drogas psicoactivas; en Inglaterra es bastante más
frecuente que en nuestro medio, pero su uso va en aumento. Las sustancias que
se utilizan con más frecuencia son : mefedrona, GHB, GBL y metanfetamina. El
objetivo es mantener una excitación sostenida para mantener relaciones sexuales
durante horas o días con múltiples parejas sexuales; con los riesgos para la
salud que esto conlleva.
Bibliografia.